Costa Rica ha confirmado la presencia de la variante JN.1 del virus SARS-CoV-2, según informes del Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (Inciensa). El primer caso identificado es el de un hombre de 54 años, residente de Aserrí, sin historial de viajes al exterior.
Esta subvariante de Ómicron ha generado preocupación a nivel mundial debido a su aparente mayor contagiosidad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) la ha incluido en su lista de «variantes de interés», lo que resalta la importancia de monitorear su propagación y tomar medidas preventivas.
Características de la Variante JN.1:
- Es una subvariante de Ómicron, descendiente de la subvariante ‘Pirola’.
- Presenta alrededor de 30 mutaciones en la proteína de pico, que facilita la entrada del virus en las células del huésped.
- Se ha observado una aparente mayor eficiencia en la transmisibilidad en comparación con otras subvariantes.
El epidemiólogo Juan José Romero señala que, aunque la variante no muestra grandes cambios en la presentación de la enfermedad, su rápida propagación a nivel mundial ha generado un aumento en la cantidad de casos observados.
Recomendaciones y Precauciones:
- Es crucial mantener medidas de prevención, como el uso de mascarillas, el distanciamiento social y la higiene frecuente de manos.
- La vigilancia y la pronta identificación de casos son fundamentales para contener la propagación de la variante.
- Se recomienda seguir las directrices de las autoridades de salud y mantenerse informado sobre la evolución de la situación.
La variante JN.1, identificada por primera vez en Estados Unidos en septiembre de 2023, ya se encuentra en varios países, subrayando la importancia de una respuesta global coordinada para enfrentar la pandemia.