Debido a las irregularidades de los medidores, el costo económico tiene un impacto directo en la tarifa que paga el usuario por el agua potable.
Según, la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP), realizó una evaluación de la calidad en varios cantones del Pacífico Central, operados por el Instituto de Acueductos y Alcantarillados (AyA), y encontró pérdidas de ₡743 833 213 al año por medidores trabados, con fugas u otros daños.
De los resultados obtenidos, se extrae que se está registrado un menor consumo por
usuario a los debido al mal estado de los medidores, lo cual ha provocado un traslado
de costos a todos los usuarios, independientemente si el medidor está en buen estado
o no, provocando un costo económico “social” para la sociedad.
ARESEP, indicó que realizarán un procedimiento que consiste en la ubicación del medidor, retirarlo y análisis en pruebas de laboratorio para su calibración, para que cumplan con las normas técnicas y su reinstalación.
De acuerdo con la información obtenida por ARESEP, por medidores trabados o sea que no marcan consumo, se estima un costo social de ₡452 158 091, medidores con fugas y daños varios, quiere decir que el agua se pierde antes de que ingrese al medidor, se estima un costo económico social de ₡159 037 351. Mientras que medidores con errores de medición más altos de lo permitido, significa que el medidor mide menos de lo correcto, sería el costo de ₡132 637 770.
Los montos dejados de facturar para aquellos usuarios, tanto por razones técnicas
como no técnicas, vienen a engrosar el porcentaje de pérdidas de agua que registra el
AyA (54%), el cual es muy superior a los parámetros internacionales (30%).
ARESEP, le solicitó a AyA que debe de tomar acciones a corto y nediano plaza, debe de proceder con la sustitución del parque de medidores e incorporar la medición inteligente.
Por el momento ARESEP, le indicó al AyA, que los medidores debe de tener tapa de protección y sello de seguridad, para evitar facturaciones erróneas.
Además garantizar que los medidores tengan capacidad de drenado del agua de su caja o bien lavarlos, para mejor lectura y manipulación. Reemplazar los medidores trabados y aquellos que presentan
comportamientos atípicos.
Realizar un análisis específico del estado de los medidores atendidos por la
Oficina Cantonal de Puntarenas con el fin de determinar las posibles causas de
la alta incidencia de hidrómetros trabados e indicar la causa por la cual no
fueron sustituidos de manera oportuna.
Verificar y actualizar las bases de datos del parque de medidores disponible.
Además, se le ha reiterado la obligación de realizar las gestiones respectivas
para que se realicen las lecturas de consumo respectivas, a fin de evitar
estimaciones por promedio y la falta de control del estado del medidor.